Madrid terminado en Z
Los años ochenta del siglo pasado, dicen las crónicas,
propulsaron la entrada de la ciudad de Madrid en el circuito de urbes con
proyección cultural a nivel peninsular. De ahí que diferentes proyectos
largamente pensados se hiciesen realidad en distintos ámbitos con el objetivo
de promocionar la capital de España.
Dentro de ese proselitismo, quizás en
respuesta a lo ocurrido en la década anterior en Barcelona, el cómic estuvo en
ocasiones a la altura de los tiempos, eso sí con apoyo oficial incluido, una
costumbre que no se pierde con el paso de los años, pero siempre que se guarde
cierta compostura de alineación con el poder gobernante.
Madriz fue el nombre
de una revista en la que participó un largo elenco de dibujantes e
ilustradores, unos con fortuna otros con menos en sus trabajos editados por la
Concejalía de Juventud del Ayuntamiento de Madrid.
Citar los colaboradores de Madriz es una tarea ardua, por
eso el número 10 que ilustra la reseña puede servir para hacerse una idea de
dicha publicación que murió a los tres años de edad. En tan poco tiempo no pasó
inadvertida, incluso fue criticada por unos y otros, también sufrió retrasos y
presiones en contra de torquemadas de la corporación municipal de aquellos
tiempos.
A lo que estamos, en aquella décima entrega dieron vida a las
páginas con sus estampas -unas costumbristas, otras posmodernas- LPO, Javier de Juan, L. Serrano, Cueto, Martín Marcos, Camus, Rubén,
Fernando Vicente, Calonje (autor de la portada de arriba), Keko Godoy, Arranz,
Ana Juan, Victoria Martos, F. Del Barrio, Guzmán y OPS.
No hay comentarios:
Publicar un comentario